Rafting

Consiste en bajar por las corrientes rápidas de los ríos a través de una balsa de neumático que debe ser dirigida por la embarcación compuesta generalmente por 4 y 8 participantes.

Este deporte aventura encuentra gran cantidad de adeptos por ser una actividad que no requiere de mayor preparación y de un equipo que es proporcionado por las agencias, el cual incluye la balsa, trajes de neoprén, casco y salvavidas, entre otros.

Existe peligro de caídas, pero para el rafting en familia existen aguas tranquilas. Los trayectos van desde 1.5 hasta 35 kilómetros.

Historia

Deriva de los navegantes de rápidos –generalmente cazadores, pescadores y exploradores- que descendían en pequeños botes y también balsas. Luego fue una práctica recreativa en Estados Unidos y Europa y en 1950 predominó en competencias internacionales.

En Chile

Chile cuenta con ríos aptos para la práctica de este deporte. Los ríos Futaleufú y Bío Bío son los mayormente reconocidos por quienes disfrutan de esta disciplina, aunque las aguas más tranquilas también son alternativas cotizadas por los turistas.

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